De Tacones y Bolsos - diseño independiente: Encuentros
Mostrando entradas con la etiqueta Encuentros. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta Encuentros. Mostrar todas las entradas

jueves, mayo 08, 2008

Encuentro con...

La Casita de Wendy
Museo del Traje, 7 de mayo

Este miércoles el Museo del Traje invitó a Inés e Iván de La Casita de Wendy a uno de los tradicionales encuentros con diseñadores.

En la mesa, Iván e Inés, Carmen Pérez, subdirectora del museo, Brenda Chávez, periodista y especialista en moda y arte y Miguel Fernández de Molina, licenciado en ciencias políticas y sociología, imparte clases de sociología de la moda y colabora con distintos medios además de con La Casita de Wendy en cuestiones de marketing.

Una primera presentación por parte de Carmen de los asistentes y en especial de Inés e Iván. Ambos vienen de mundos que nada tienen que ver con la moda. Inés estudió arquitectura e Iván filosofía e ingeniería agrícola. Su ropa es alegre y joven, con formas originales, colores, geometrías, estampados. Su trayectoria es interesante y exitosa. Venden tanto en Oriente, como en Europa y EEUU. Han participado en exposiciones colectivas como La moda española, tras el espejo en el Museo Reina Sofía.

Con esta presentación, estábamos deseando que Inés e Iván tomaran la palabra. Lo hacen y nos comentan que van a ir proyectando un vídeo con sus distintas colecciones para hacer la presentación de la marca, contarnos la historia, como trabajan, dónde se inspiran, su evolución...

Inés nos comenta que efectivamente vienen de mundos diferentes a la moda, pero que son dos personas muy inquietas. Hemos aprendido a hacer moda de forma intuitiva y sobre la marcha. Estudiaban lo que veían que necesitaban de forma autodidacta.

Iván toma la palabra. Empezamos en la moda de forma casual. Cosían ropa para ellos porque les gustaba. Y estuvieron compaginando otros trabajos con la realización de ropa de forma amateur. Esos años fueron como una escuela. La ropa que hacían gustaba y tuvieron la oportunidad de llegar a tiendas, salir en prensa. Así se pasaron 2 años haciendo ropa sin ser una empresa. La empresa la fundaron en 2001.

La primera colección la presentaron en Benicasim y le regalaron un par de vestidos a Björk. Con uno de ellos salió mucho en prensa, lo utilizó como imagen y esto les dio muchísima repercusión. Además de ánimo, ya que Björk tenía acceso a ropa de diseñadores muy vanguardistas y ropa chula y que eligiera uno de nuestros vestidos como imagen pues fue muy importante. Esto les abrió puertas de tiendas, prensa,...

A partir de este momento trabajaron más en serio y la colección de invierno 02-03, Handmade, fue su primera colección como empresa. La idea motor de la que partieron para construir la colección fue el traje regional español. Se documentaron sobre el tema con fotografías, yendo a exposiciones, a fiestas de pueblos,... De toda la información recogida, extrajeron las pautas que iban a seguir y desarrollaron imágenes, colores y estampados, en este caso, relacionados con los pueblos de España. Y esta es siempre su forma de trabajar: eligen un tema que les gusta, sobre el que les apetece trabajar, que les da las ideas y que marcará las pautas para empezar a construir.

La idea es reinterpretar lo que cogen, lo que ven, no hacer, por ejemplo, un traje regional. La prenda final no tiene porque identificarse con la idea de partida. Recoger ese carácter de hecho a mano, el cariño, las horas de trabajo y llenar la colección de esas ideas: artesanal y hecho a mano. En esta colección hubo cosas que las hicieron ellos mismos durante meses. Durante este periodo es cuando se empiezó a gestar la filosofía de La Casita de Wendy: trabajo artesanal. También recogieron los lunares en punto tricotado,...

Con esta colección se salió fuera de España, a la feria internacional de París que se celebra durante las semanas de los desfiles. La colección tuvo mucho éxito y les hicieron pedidos tiendas que nunca jamás soñaron que pudieran comprarlos: los almacenes Barneys, Matsuya en Tokyo, ... Fue una total sorpresa el éxito en París y tuvieron que empezar a pensar como empresarios en lugar de como diseñadores. Inés nos cuenta que para poder mantener el compromiso adquirido con esta colección, se pasaron todo el verano cosiendo casitas, botones,... todas las aplicaciones que llevaba la colección inspirada en los trajes regionales y en los pueblos de España. Qué ellos mismos exclamaban, ¡cómo hemos podido poner tantas cosas! Y que Inés, que cosía muy mal, acabo cosiendo bien: la práctica.

La siguiente colección fue la de verano 03, Wonderland, que vendieron en España y en París. El tema que eligieron fue el pic-nic y Alicia en el País de las Maravillas. Siguieron con los lunares y las aplicaciones porque les habían gustado mucho de la colección anterior. El fotógrafo con el que trabajan es Ramiro E, fotógrafo argentino, que además de ser fotógrafo de moda está muy pegado al mundo del arte. Busca el contraste entre la ropa un tanto näif de La Casita de Wendy y la realidad. Sus fotos son más un retrato de la persona que una fotografía de moda. Para esta colección se inspiraron en las fotografías que Lewis Carroll realizaba a la niña Alexandra Kitchin y a sus amigas: niñas jugando que se disfrazan. En la colección encontramos estampados de frutas, animales bordados,...

En la colección de invierno 03-04 les apeteció utilizar el color negro que no había aparecido en ninguna de sus colecciones pero dándole sentido del humor. Eligieron como tema el personaje de Beetlejuice creado por Tim Burton. En la pantalla vemos los dibujos que se prepararon para el desfile que realizaron en Circuit, Barcelona. Se comenzaba con el color negro para ir incluyendo poco a poco el color. Inés nos cuenta que el desfile se realizó un día soleado de invierno, en el Tibidabo, en un parque de atracciones que ya no se usaba, con autos de choque abandonados, y que fue un escenario estupendo para presentar la colección. Hicieron también referencia a Pesadilla antes de Navidad, murciélagos,... Nos cuentan que las chicas de las fotos son chicas de la calle, amigas, no son modelos. Quieren alejarse de los estereotipos. Los detalles de la colección les seguían complicando la producción que luego pedían las tiendas.

Con la colección de verano 04, Fairy Tales, comenzaron a desfilar en Cibeles. Fue bastante duro porque solo estaban ellos dos para llevar la producción. Se inspiraron en los iconos de distintos cuentos. Además en las fotos para el catálogo utilizaron ilustraciones de una amiga suya. Querían mostrar lo que las chicas sueñan en los cuentos, en la fantasía, lo que se imaginan que son y al mismo tiempo mostrar lo que realmente eran. Las fotos se hicieron en un barrio a las afueras de Madrid buscando ese contraste entre las chicas vestidas de cuento y la realidad. Vemos cisnes, soldaditos de plomo,... Para Pasarela Cibeles tuvieron que montar una imagen más clásica, las chicas son las modelos establecidas, la pasarela es la pasarela, ir y volver,... Creativamente hablando es menos enriquecedor, nos dice Inés, pero a nivel de repercusión para la empresa es mucho más interesante.

Para la colección de invierno 04-05 se inspiraron en sus amigos. La colección se llamó My friends e hicieron ropa para sus amigos. Fue más complicado centrarse y que la colección quedara coherente en colores, líneas, aplicaciones,... los gustos de los amigos son diferentes aunque, como dice Iván, son nuestros amigos y nos gustan las mismas cosas. ET, gatos, música, lazos, cintas,... son algunos de los elementos que vemos en esta colección. Dejaron la pasarela porque estaban sobrepasados de trabajo. La parte de venta y comercial se había descuidado. Hicieron una presentación y una exposición con las fotografías de Ramiro en una galería de París, que funcionó muy bien. Y es que el esfuerzo que exige preparar una colección para pasarela es muy alto.

De lo que vamos viendo en las fotografías del vídeo, nos explica Inés, 15 conjuntos son para el catálogo y luego la colección se compone de unas 80 piezas. A partir de las prendas que constituyen un poco la imagen de la colección se desarrollan otras más ponibles. Se separa la imagen de lo que quiere la gente. Trasladan sus ideas a lo que la gente pide. Así, un estampado que se hizo para una chaqueta hecho a mano, bordado, se adaptó luego en serigrafía para camisetas mucho más cómodo para el cliente. Al principio diseñábamos ropa para nosotros, dice Iván, sin importar precios o si iba a gustar o no. Pero cuando entras en el circuito comercial hay que pensar en lo que la gente se puede poner: un poco para ellos pero que la colección se venda y se use.

En verano del 2005 el tema de la colección Natacha fue la silueta. Patrones sencillos para prendas sencillas. Los gráficos, los colores, son los que complicarán la prenda. Quisieron hacer un ejercicio sobre los patrones. Eligieron un patrón y lo utilizaron de diferentes formas: el patrón puede ser el mismo pero la prenda resultante es diferente al aplicar el grafismo.

En la siguiente colección sí que hicieron pasarela en Barcelona. La idea era mostrar que los elementos unidos tienen un significado diferente que por separado. Además, en lugar de usar estampados que es lo que venían utilizando, usaron colores planos. Cada una de las chicas llevaba un color, un conjunto y luego al final se juntaban y la historia resultante era diferente. Empezaron, además, a desarrollar diferentes líneas de trabajo: cuadernos, otras líneas de ropa,.. y ahora tienen una línea de complementos.

Hablando ya de las última colecciones, en la de verano 07, Paint a vulgar picture, experimentaron con pinturas, pintando a mano los tejidos. Utilizaron gasas, tejidos vaporosos con los que no habían trabajado. La imagen era más pastel, con muchos degradados, pero manteniendo los contrastes.

Y en invierno 07-08 volvieron a los estampados y se inspiraron en el cuento de la Reina de las Nieves, dejando un poco la imagen näif e infantil con la que se asocia a La Casita de Wendy. Los niños también pueden ser malos, decía Iván, aunque luego también cariñosos. Ese contraste es lo que buscaban.

La colección que ahora mismo está en las tiendas es la de este verano y se llama King of the bongo. Inspirada en África, la selva, las cosas tribales, también en la diversión, en la música. En los estampados veremos motivos relacionados con la selva, flores, bolas de madera,...

Y la colección para el invierno 08-09 estará inspirada en las mil y una noches. Será, de nuevo, una reinterpretación. Habrá colores nuevos como el oro, aplicaciones por supuesto en forma de estrellas, lunas, gatos, búhos,.., elementos nocturnos.

Inés e Iván nos cuentan ahora los distintos proyectos en los que han participado:
  • Aniversario de barbie: le hicieron un vestido de bolitas
  • Absolut label: la marca de vodka quiso hacer una colección de ropa y cada diseñador que participó tenía que contar algo de su país. Diseñaron una camiseta basándose en el cuento que de pequeños nos contaban sobre una ardilla que podía recorrer el país de árbol en árbol, utilizaron también lunares,...
  • Una colección para las Supernenas, con las Supernenas hechas con aplicaciones, con lentejuelas,...
  • Participaron en el 10º aniversario del Festival Internacional de Benicasim (FIB)
  • Colaboraciones para Converse y Vans.
  • Además complementos, cuadernos, agendas, ropa para el hogar, ropa para bebé, leotardos,...
Hace poquito comenzaron con su segunda línea de ropa, HAPPY, más económica, más sencilla, con sus estampados pero más ponible.

Se abre el debate con Brenda y Miguel. Brenda apunta que es muy loable que la producción de La Casita de Wendy se realice en España, no fuera como se suele hacer para abaratar costes. Iván comenta que prefieren sacrificar el precio y ofrecer calidad. Inés añade que las personas con las que trabajan constituyen un valor añadido. Algunas tiendas les han hecho firmar que lo que se está haciendo se hace en Europa y pagando salarios europeos. Les gusta tener una buena relación con la persona que realiza las prendas y valorar el trabajo artesanal.

Brenda les pregunta sobre su proyecto de reciclaje. Inés nos cuenta que siempre les daba mucha pena tirar tejido, material que se queda obsoleto, que has usado para una colección y que llega un momento que tienes que tirar porque si no no cabe más tejido. Decidieron sacarlo partido: que un estampado se haya utilizado en una colección no implica que muera. Así que con esos tejidos han montado una tiendita, RECYCLING, donde se pueden encontrar tejidos, vestidos para bebés, juguetes,... Muy interesante. También nos desvela Inés que quieren montar una tienda con las cosas que se encuentran por la calle, que son muchas, y que la gente tira.

Brenda reflexiona que lo que hacen es lo que les apetece realmente, no van en comunión con las últimas tendencias y vanguardias. Inés dice que cuando alguna vez han hecho alguna prenda que seguía las tendencias del momento, no se vende: la gente que compra La Casita de Wendy busca otra cosa. Aunque como empresa es más sencillo hacer cosas que vayan con la tendencia, no es su concepto. Han tenido la suerte de que hay gente que empatiza con su universo aunque no sea tendencia. Brenda comenta que su trabajo, al margen de las tendencias, es un trabajo creativo. Inés e Iván nos cuentan la colaboración con Alicia Framis en la elaboración de una prenda basada en la bandera de china. También participaron en el proyecto que Andrea Crews va organizando por diferentes ciudades y que consiste en invitar a varios diseñadores a reciclar ropa. En la Casa Encendida de Madrid se apiló una gran montaña de ropa vieja y había que trabajar con ella. La ropa vieja no hay que tirarla y por eso quieren que la ropa de La Casita de Wendy sea atemporal y que puedas ponértela siempre que quieras. Como las prendas que hacían los antiguos costureros que eran para toda la vida.

Miguel les pregunta sobre el uso de material ecológico en La Casita de Wendy y si el gobierno puede hacer algo más para ayudar a los diseñadores a que compren este material. Inés comenta que a raíz de un proyecto que hicieron con Greenpeace investigaron a ver si el tinte que utilizaban para sus estampados era tóxico. Para su alegría descubrieron que no. Ahora el material ecológico es más fácil de conseguir pero sigue siendo caro, dice Inés. Para la siguiente colección han conseguido fabricantes más asequibles e incluirán tejidos ecológicos.

Se cambia de tema y Brenda habla sobre las subvenciones que reciben muchas firmas. Ella opina que está bien que el gobierno subvencione la cultura pero hay cosas que se mantienen de esas subvenciones y eso no debería ser así. Deberían mantenerse con la oferta y la demanda. Si no hay demanda, quizá ese producto no deba estar en el mercado. Inés cuenta que ellos no han recibido ninguna subvención, que algunas han pedido pero no se las han concedido. Tenemos que adelantar mucho dinero porque las tiendas pagan cuando entregas la mercancías, dice. Para ella el problema reside en que no hay una comisión de expertos que valore a quién se le da la subvención, por cuanto tiempo,... Que se han dado cuenta de que en muchos casos depende de los círculos en los que te muevas, y ellos no se prodigan muchos en según que saraos.

Con las preguntas del público nos enteramos de que Iván estudió patronaje porque se dieron cuenta que para transmitir a la gente que les cosía la ropa lo que ellos querían, necesitaban saber de patrones. Nos resultaba complicado explicar cómo queríamos que se hicieran las cosas y además nos dábamos cuenta de que al no saber, luego la persona que cosía, cambiaba cosas, reinterpretaba... Y que les encantaría hacer moda masculina pero les falta tiempo. Hacer una colección para hombre implicaría empezar de nuevo, reflexiona Iván, nuevas tiendas, en las que vendemos ahora son tiendas de chica,... Nuevos patrones, otros gustos, tejidos diferentes, apunta también Inés. Es un ejercicio que requiere tiempo y que lo harán cuanto dispongan del mismo y sean más gente en el equipo.

Con esto se cerró el encuentro, que supo a poco porque Inés e Iván se mostraron en todo momento muy cercanos y enamorados de La Casita de Wendy. Muchas gracias a los dos por compartir vuestra ilusión con nosotros.

Y para poner broche de oro al encuentro de ayer, qué mejor que reencontrarnos nuevamente con La Casita de Wendy en el mercadillo que desde hoy jueves y hasta el sábado 10 tiene lugar en la c/Argensola, 9, 2D. El viernes 9 de 11 a 20h y el sábado 11 de 11 a 14h. Pago en efectivo.

Complementos, joyitas, camisetas HAPPY, vestidos de verano, juguetes, tejidos por metros,...

No voy a poder mentiros, sobre todo cuando veáis las siguientes imágenes en las que la cámara me pilla con perchas en la mano: compré, sí. Y sí, os lo enseñaré...

jueves, junio 14, 2007

Encuentro con...

Roberto Verino
Museo del Traje, 13 de junio

Este miércoles el Museo del Traje invitó a Roberto Verino en sus ya tradicionales encuentros con diseñadores.

Acompañando a Roberto Verino en la mesa, Mara Canela Fraile del Departamento de Difusión del Museo del Traje, Pedro Mansilla, sociólogo y periodista, y Charo Izquierdo, directora de la revista Yo Dona.

Comienza Pedro hablando de Roberto y de lo que implica ser diseñador. Un diseñador tiene que ser artista y empresario. Y Roberto Verino está en el centro de estos dos extremos. Aunque le gusta más ser artista. A Roberto Verino le encanta dibujar, tocar los tejidos, comprarlos, ver la fábrica donde se van a realizar sus productos… Lo que se llama entrar en materia. Sin esto se moriría, sentencia Pedro.

En España con ser un artista y ser bueno no es suficiente. No se abre el paraguas. No aparece nadie que se interese por lo que haces. En la mayoría de los casos se busca financiación familiar. Muchos diseñadores que crees que al año siguiente estarán desfilando en Nueva York, echan el cierre y empiezan a servir copas. Tampoco sirve de mucho que te den premios como la T de Telva o la Aguja de Oro.

¿Qué hacen entonces los diseñadores?, nos interroga Pedro. Algunos se deprimen. Otros trampean y otros consiguen un buen director de empresa. ¿Qué hace Roberto Verino cuando decide quedarse, no solo en España, sino en su pueblo a cuatro horas de Madrid? Paciencia. Esto es lo que hay. Decide hacerse empresario de sí mismo. No hay más remedio. Sino todo este invento no tiene sentido. Y además se va a hacer empresario de sí mismo tres veces. Todo por las leyes de la moda que cambian cada diez años. Cuando Roberto Verino se da cuenta de que tiene que ser empresario de sí mismo en España, resulta que además tienes que fabricar. Esto implica un seguimiento de las telas, hacer los patrones y fabricar. Controlar todo el proceso de fabricación para conseguir una colección. Con eso se vendía a las tiendas lo que habían elegido por muestrario en el hotel Savoy. ¡Qué tiempos!

Roberto Verino es el diseñador más querido por la empresa española. Cada 6 meses mantiene un interés difícil de alcanzar.

Ahora es necesario que el producto se venda bien en el mercado internacional. Y otro quebradero de cabeza son las tiendas multimarca. Pero con los puntos de venta conseguidos en el Corte Inglés y las tiendas propiedad de la empresa, se puede decir que Roberto Verino ha pasado su tercer examen.

Pedro Mansilla termina diciendo que la persona es superior al personaje.

Charo Izquierdo quiere empezar por algo que le moleste en lugar de por tantas alabanzas. Yo tengo lío con tu nombre, dice. Siempre te llamaba Manuel hasta que empecé a ver que todo el mundo te llamaba Roberto. Y luego ya me daba corte llamarte Manuel. La gente iba a pensar que no sabía cómo se llamaba Roberto Verino.

La verdad es que no lo conozco bien, continúa Charo, entre otras cosas porque es gallego. Pero lo que sí está claro es que ha conseguido mantenerse fiel así mismo. Habla siempre con el corazón abierto, como un amigo de la infancia. Es un diseñador que siempre está ahí. Y ha demostrado que hay vida después del trabajo dándose a la bebida, bueno, al vino. Sonríe Roberto. Ya felicitaba la navidad con una botellita de orujo para la quemaida, cuenta Charo, así que no es de extrañar. El vino es un juego, un coqueteo para demostrar que se pueden hacer más cosas. Y después de todo esto, defiéndete, le increpa Charo a Roberto.

Me gusta vivir, responde Roberto. El vino sirve para seducir igual que la moda. Y a mí me gusta seducir. Quiero ser auténtico y comprometido con el público. Y es lo que he intentado en estos 25 años dedicado a la moda. Creo que Madrid es el futuro. Hay energía para que sea posible. La ciudad es todo un hervidero de posibilidades.

Es verdad, le corta Charo, este año celebra sus bodas de plata en la creación. En 1982 sale su primera colección de prêt-à-porter; en 1987 fue el primero en apostar por tener un corner en el Corte Inglés cuando solo llevaba tres colecciones en Pasarela Cibeles. Fue de los primeros que demostró que no se podía construir la casa por el tejado. Trabajo, trabajo y trabajo. Primero una tienda en Madrid y luego ya vendrán el resto. Nunca creyó que el diseño bastara. Vio la moda como un negocio.

Háblanos de la influencia de las mujeres de tu familia, le conmina Charo. Pues sí, las mujeres de mi familia y también mi padre han tenido una influencia muy positiva en mí. Mi abuela con 98 años se ilusionaba con todo lo que hacía como si fuera una chica de 20 años. Mi padre también tenía esa energía. Murió hace unos meses y era capaz de sonreír después de sufrir una crisis respiratoria. De esta ya me he librado, decía. Mi madre también tenía mucha fuerza. El mérito de la empresa, comenta, se lo debo a mi familia: a mis padres y a mis hermanos. He tenido mucho apoyo para sobreponerme a todas las adversidades.

Roberto Verino siempre ha ido piano, piano, dice Charo. Cuando los periodistas le preguntaban, ¿por qué no haces bolsos?, él decía, primero tengo que afianzar lo que tengo. Efectivamente después vinieron los bolsos, las gafas, la cerámica. Y cuando las mujeres habíamos caído rendidas a sus pies, se le preguntaba, ¿por qué no haces hombre?, y él respondía, primero tengo que afianzar la ropa de mujer y luego ya llegará el hombre. Y así ha sido. ¿Para quién te gusta diseñar más, para el hombre o para la mujer?, le pregunta Charo.

Me gustan las mujeres y disfrutan más de la moda. Me siento muy respaldadas por ellas, contesta Roberto.

Charo continúa diciendo que si no fuera gallego sería catalán por su sentido común que no tiene que ver con estancarse. Roberto Verino siempre ha sido muy valiente: corners, abrir showrooms, abandonar la pasarela… Abandonada pero no dejada, puntualiza Charo, seguramente para dar el salto a Nueva York.

Tiene una gran capacidad de trabajo y siempre con una gran sonrisa. Sabe dar a las cosas la importancia justa. Se trabaja mucho con él pero nunca ha faltado un buen vino al final de la jornada, dicen los que están a su lado.

Roberto Verino contesta. El sentido común, pues sí, es una característica de mi persona porque estoy cansado de pegarme con muchos proyectos.

¿Por qué no hay empresas de moda en España? Porque no son rentables, sentencia Roberto. Hagamos que esto cambie. Ya está cambiando porque hay empresas que no es que sean rentables, son rentabilísimas. Y esta es la única manera de conseguir respaldos financieros. Hay que convencer, que no imponer, a un mercado para ser rentable. Convencer, primero seduciendo, y creando satisfacción en ese consumidor para que me prefiera a mí frente a otro diseñador. Soy optimista. Esto también lo he heredado de mi familia. Mi padre era muy optimista.

Me gusta competir y ganar. Subir al podio. Del 3 para abajo, me da algo, comenta entre risas. Pero hay que ir despacio. Lo importante es conseguir que las cosas se realicen aunque sea en más tiempo. Es mejor fijarse objetivos alcanzables, que no que sean imposibles. Considero que esto es lo normal, que todos deberíamos actuar con este principio. Mi objetivo, que todos fuéramos felices todos los días y así se generaría más energía positiva. Por eso intento no disfrazar a las mujeres; para que se sientan bien y que disfruten con la moda.

La búsqueda de la excelencia no acaba nunca, pero es lo que te permite seguir mejorando.

Charo vuelve a tomar la palabra. Después de escucharlo no es de extrañar que a Roberto le quiera todo el mundo. Se nota en los encuentros de moda que se organizan en Yo Dona, comenta. En los que participa Roberto, sus compañeros le miran y esperan a que él hable primero. Y los periodistas también te quieren mucho. Roberto se ríe. Sí, los periodistas me han mimado mucho. No te fíes, le dice Charo.

Roberto prosigue. Si antes he hablado del apoyo de mi familia en mi proyecto, también tengo que decir que he conseguido colaboradores muy eficaces. Y si están conmigo desde entonces es porque ha habido magia, química, digo yo.

Las prisas le dan miedo. Para que el mercado te valore hay que ser auténtico. Mejor pocos muchos que muchos pocos.

Charo comenta. Cuando trabajas transmites mucha tranquilidad. Cameron, uno de los modelos que ha trabajado con Roberto Verino, dice que siempre estás muy relajado y que dispones de tiempo para hablar con los modelos. Macarena, una de sus colaboradoras, dice que cuando confía en alguien le da total libertad. Roberto dice que es importante rodearte de buenos profesionales y dejarlos trabajar. Ellos se lo han ganado a pulso.

Charo pregunta. Una de sus grandes cualidades es la humanidad. ¿Quién manda más el hombre o el profesional? Pues teniendo en cuenta que detrás de mí hay 500 personas, todas ellas con una nómina, responde Roberto, uno tiene que ser muy profesional. La parte humana está ahí pero hay que actuar con rigor. Pero esto no quiere decir que las dos partes tengan que estar reñidas.

Soy una persona sencilla que le gusta disfrutar de las pequeñas cosas. Y buscar en ellas aquello que nos pueda convertir en mejores personas. Generaríamos un mejor entorno y habría menos crispaciones.

El marco de nuestro trabajo es complejo. Sino hubiera pasión en lo que hago, sería difícil dedicar tanto tiempo, tantos sacrificios.

En el vino y en la moda hay puntos comunes ya que hablamos de disfrutar.

No me cuesta esfuerzo extra trabajar. Es una fortuna tener un trabajo que puede hacerte feliz. Me considero muy afortunado de haber encontrado este trabajo que me apasiona.

Pedro le hace una pregunta que está en la mente de muchos. ¿Por qué no hay desfiles Roberto Verino? Por la imposibilidad de compatibilizar el esfuerzo que se necesita para abrirse al mercado internacional y el esfuerzo de hacer una colección. Los desfiles, en muchas ocasiones, le han distanciado del consumidor. Conseguir cerrar telediarios, salir en la portada de los periódicos, es muy complicado y te obliga a usar más transparencias, hacer más ostensible el pecho. Y esto te aleja de muchas mujeres.

En tres años sin hacer desfiles se ha conseguido cambiar el diseño de las tiendas y atender al mercado internacional. Aún no en Nueva York porque han salido muchas oportunidades para abrir tiendas en México y Oriente Medio.

Pedro pregunta. ¿Y ahora por qué volverías? Roberto responde. La prensa americana exige tener puntos de venta y hasta que esto no está, no hablan de uno. Luego hay que conseguir patrocinador, etc. Y ahí estamos.

Las personas apasionadas en su trabajo, obsesivamente apasionadas, comenta Pedro, suelen ser personas que se desilusionan. No estás, al mismo tiempo que ilusionado, ¿desilusionado con la moda? Todos los que están en nuestro mundo, dice Roberto, son conscientes de la complejidad del mismo. Hay altibajos pero duran poco. Duermo bien y con profundidad. Cada mañana me levanto con las pilas cargadas y con ilusión. Hubo momentos malos que no me gustaría que no se repitiesen, pero pesan más los buenos.

Los numerólogos dicen que cada 5 años se han producido cambios importantes para mí: en 1982, la primera colección; en 1987, el corner en el Corte Inglés ; en 1992 las primeras tiendas en España y la primera licencia para perfume y en 1997 la colección de hombre. Al sumar los periodos dan 10 y quiero creer que ese 10 es un 10 para mí. Y este año también va a ser importante.

Llegamos al turno de preguntas. Comienza Charo. ¿Cómo es la participación de un diseñador en la creación de una fragancia? Bueno, comienza Roberto, yo te puedo hablar de la mía. Me implico mucho en el proceso de creación. Luego un experto perfumista realiza varias propuestas, todas ellas intentando reflejar lo que se quiere transmitir. Se hacen pruebas con los que tienen buenas narices, los narices, para ver cuál es la fragancia que mejor se ajusta a lo que se quiere. También hay que tener en cuenta el frasco, envoltorio, el nombre…

Pedro comenta que en el Museo del Traje se celebrará una exposición con motivo de los 25 años en la moda. ¿Qué vamos a poder ver? Pues será una retrospectiva desde el año 1982. Se expondrán vestidos seleccionados de las distintas temporadas, también habrá fotografías de pasarelas y de todo lo que haya ido ocurriendo y que pueda ser interesante.

Pedro reflexiona: Sin ZARA la moda iría mejor. No lo comparto, dice Roberto. Ha conseguido que profesionalmente nos tengamos que aplicar mucho. Gracias a ZARA en el extranjero la moda española es conocida. ZARA ha conseguido que se mire a España. Mi reto es alcanzar a un público que ya no se conforme con ZARA. ¿Qué les envidio? Ellos tienen más tiendas y mejor situadas pero nosotros vamos creciendo. ZARA ha roto con lo que conocíamos por colecciones. Cambian cada semana, reponen el producto de más éxito cada 15 días. Venden aunque esté mal hecho. Les funciona la cultura de usar y tirar. ZARA nos pone las pilas y eso no es malo.

¿Qué elementos nuevos te ha aportado la apertura al mercado internacional? Bueno, la línea se ha consolidado. No se hacen propuestas para cada país. Aunque en Oriente Medio hay que aprender ciertas costumbres. Se hace una propuesta que intenta convencer allí donde se ofrece el producto. Desde luego que resulta más fácil vender un abrigo en Oviedo que en Sevilla, pero eso no quiere decir que la gente de Sevilla no viaje, por ejemplo, y necesite abrigo.

Uno de los problemas de la moda española ha sido la distribución. Al entrar en ella se ha podido reducir el porcentaje del distribuidor. Nos hemos desecho del precio de la tienda multimarca y se puede ofrecer mejor precio.

Los jóvenes son lo que más me interesan. Me comprometo a hacer una moda para ellos. Dar una solución a los desfiles y ofrecer, de acuerdo a su perfil, otro tipo de moda: más barata, más arriesgada.

Mis principios se basan en un concepto de sencillez y de temporalidad. Que la ropa no pase de moda y que siente bien.

Respecto a qué le influencia para diseñar las colecciones, Roberto nos cuenta que tu pasado histórico te marca y nunca partes de un folio en blanco. Partes de unas propuestas que ya han sido aceptadas y cada temporada tratas de añadir elementos nuevos que te diferencien y que seduzcan, pero manteniendo tu estilo. No hay una fórmula mágica. La inspiración viene de lo que te emociona: un viaje, una película, estar con gente llena de vida. Es un trabajo que se autoalimenta.

Para finalizar, Pedro le pregunta por sus maestros sentimentales. Coco Chanel, responde Roberto, siempre me ha impresionado por lo que hizo. Balenciaga por la maestría en sus líneas. Y por Giorgio Armani siento una gran admiración. Ha cambiado bastante la forma de vestir de este último siglo. Ha conseguido que la mujer se sienta guapa respondiendo a unos nuevos roles y a su incorporación a trabajos similares a los de los hombres.

La última frase de Roberto fue: El que tiene la última palabra es el que tiene la VISA en la mano. Muchas gracias.

lunes, abril 02, 2007

Encuentro con ...

Antonio Alvarado
Museo del Traje, 28 de marzo

La pasada semana el Museo del Traje invitó a Antonio Alvarado para que pudiéramos conocer sus impresiones sobre el mundo de la moda. Junto a él y presentando el acto, Carmen Pérez (subdirectora del Museo del Traje), Silvia Alexandrowitch (periodista) y Amalia Descalzo (Doctora en Historia del Arte y especialista en Indumentaria Histórica en el Museo del Traje, perteneciendo al Comité Científico del mismo y a su Consejo Asesor).

Carmen cede la palabra a Amalia. Alicantino, un gran observador y en constante búsqueda de libertad, así comienza definiendo a Antonio Alvarado. Desde los 8 años ya tenía muy claro a qué quería dedicarse. Con 18 años comienza a trabajar como escaparatista, lo que le aportará una gran experiencia. A los 19 años se casa con Pepa y se instalan en Granada. Se matricula en la Escuela de Trabajos y Oficios, alternando los estudios con el escaparatismo.

Su aparición en el mundo de la moda es como empresario, no como diseñador. Luego monta su propia tienda en Granada con productos de punto y ganchillo. En los 80's se instala en Madrid.

Alvarado es parte de la Pasarela Cibeles desde su primera edición, realizada en el año 1984 en la Plaza de Colón de Madrid. Formó también parte de la movida madrileña, en contacto directo con la música y el cine. Ha vestido muchas de las películas de Pedro Almodóvar.

En 1996 se instala en Barcelona y trabaja con su amigo Antonio Miró viviendo una etapa muy gratificante. En 1999 es nombrado Presidente de ModaFAD y hasta junio de 2003 dirige esta asociación con gran entusiasmo, logrando por parte de las instituciones públicas de Cataluña el apoyo a estas iniciativas y defendiendo los derechos de los diseñadores emergentes.

Realiza colaboraciones con la prensa y desde 2002 escribe regularmente en la revista Vanidad. Para la campaña de Freixenet realiza parte del vestuario de Demi Moore.

28 años en la profesión, es definido por una periodista como un alquimista de la moda y lo demuestra mezclando prendas que son varias y una a la vez. Su color preferido es el rojo y los tejidos ligeros. Su mayor triunfo, no repetir colecciones.

Posee una gran vinculación con el mundo del arte y colecciona obras de artistas que luego han diseñado estampados para sus diseños.

Le gusta la cocina mediterránea, a la que dedica tiempo en compañía de sus amigos.

Silvia Alexandrovich es una vieja amiga de Antonio. Se conocieron en Barcelona. Silvia ha escrito una lista con las cosas que caracterizan a Antonio Alvarado. Lee:
  • Amante y defensor de la sastería clásica.
  • Doble sentido a los tejidos, darle la vuelta a los tejidos.
  • Cambiar el sentido de los patrones.

  • Ironiza utilizando emblemas cotidianos o sellos de marcas. Antonio cuenta que compraba a sus amigos que trabajaban en correos los sacos para utilizarlos en sus diseños. Y otra amiga robaba los rollos de toalla de los baños para sus colecciones. Algunos de esos rollos estaban muy bien y otros muy mal, pero se apañaban para hacer cosas con ellos. No había otra cosa.
El padre de un amigo, sigue contando Antonio, trabajaba como camarero en el hotel Palace. Iban a cambiar la mantelería de hilo que llevaba una rayas en función de si se comía carne o pescado. Con aquellos manteles hicieron una colección que presentaron en Rockola, con cierres de maleta que eran más baratos que los botones.

Silvia continúa enumerando:
  • Provocación
  • Estética entre el kitch y el pop.
  • Narcisista. En mis colecciones no presento a una mujer desnuda, pero si me gusta siluetear a una mujer, apunta Antonio.
  • Multidisciplinar
  • Hiperactivo. No sabe estar parado. Si me dedicase sólo a la moda me moriría de aburrimiento. Hago muchas cosas porque no tengo miedo a nada.
  • Estética y espiritualmente almodovariano. Antonio Alvarado ha diseñado vestuario para 7 películas del director. Antonio comenta que más que almodovariano, Pedro tiene mucho de todos ellos (diseñadores de la movida).
  • Buen mezclador de mercado y tendencias
  • Buen relaciones públicas. No, no, dice Antonio. Yo soy arisco. Cuando conozco, sí, pero no al principio.
  • Y fundador y presidente de ADÑ. Antonio es un importante representante de los diseñadores más jóvenes.
Amalia le pregunta sobre la primera falda para hombre, cómo surgió la idea. Antonio cuenta. Le pidieron una colaboración para el programa de televisión La bola de cristal. 3 programas, vestuario de los personajes e impartir cursos para chicos de entre 16 y 17 años, contándoles cómo hacerse la ropa. En uno de los programas hicieron un vestido con un mantel y los mejillones fueron los pendientes. En otro programa hizo para un chico una chaqueta y una falda. En la primera pasarela vistió a las mujeres con la colección para hombre, no había otra forma de enseñarla.

Amalia le sigue preguntando. ¿Cómo es el vestido delantal? No lleva costuras, salvo en el bajo y un ojal con parte del tejido, comenta Antonio. La parte de arriba es acolchada. Sale en varios de sus desfiles.

De los zapatos, ¿controlas todo el proceso creativo?, pregunta Amalia. Mi familia se dedicaba a los zapatos, responde Antonio, así que me resulta conocido. Realizó todos los zapatos que salen en la película Mujeres al borde de un ataque de nervios.

Lo único que no he hecho ha sido ropa de niño, dice Antonio. Sólo un traje con el que salió su hijo en un desfile y que una señora le encargó para un niño que iba a hacer la comunión.

La conversación nos lleva a su colección Tacón amargo. Una colección de la movida. El nombre viene de un guión de Pedro Almodovar que no llegó a rodarse. Antonio comienza a contarnos de qué iba la historia. Las actrices iban a ser Chus Lampreave, Victoria Abril y Ángela Molina, que hacían de tres hermanas. Chus era corresponsal de guerra. Victoria, una antigua bailarina de flamenco que había tenido un accidente y tuvieron que amputarle una pierna. Se hacía hacer patas de palo con el zapato de tacón que iba a llevar. Y Ángela trabaja en un bar de carretera. Vivían de ese bar, llamado Narizone y que habían heradado de sus padres. Este bar estaba cerca de un cuartel militar. Chus quería ir al cuartel para dar instrucción a los soldados... Antonio comienza a reirse, recordando la historia y no puede parar ni terminar de contárnosla, ahora que se estaba poniendo interesente. Entre risas consigue decir que Chus reconocía a Victoria cuando llegaba a casa por el sonido de su tacón de su pata de palo, un tacón amargo.

La película no llegó a hacerse. Salía muy cara con esas tres actrices.

La conversación gira al mercado americano y los grandes holdings. Hay muchas puertas que se están cerrando a la gente que quiere empezar y no quiere entrar en esos holdings. Lacroix con una sola colección se comió el mundo. Colección que hizo para Dior. Cuando vieron la colección antes de que saliera a la pasarela, le dijeron que pusiera su nombre en las etiquetas. Y luego entrar en el holding fue lo mejor que le pudo pasar.

Sólo el 1% de lo que sale en nuestras publicaciones es producto español. No hay apenas seguimiento periodístico a la moda española. Seguimos teniendo un complejo de inferioridad. Al director le dan una lista con la ropa que tiene que salir en la revista. Los desfiles de París, Italia están arropados por dinero que no es público, no como aquí. La prensa española se porta muy mal con la moda española. Para reportajes, los estilistas esperan para que llegue un diseño de Galliano, pero no por un diseño español. Te piden 20 y de hoy para mañana. La prensa y la industria tienen que cambiar a la par.

En Italia no se hace nada. Sólo el acabado. No hay seda italiana. Y aquí la industria no ha sabido evolucionar. Aunque para qué quiere evolucionar, se pregunta Antonio, si la prensa no apoya.

Desde ADÑ hay un plan. La asociación se creó con la misión de hacer ferias internacionales, sobre todo. Para llevar a cabo acciones que individualmente no se puden realizar. Son un pequeño holding.

Durante la conferencia nos acompañan dos trajes de la colección de Tacón amargo de 1986-87. Un traje de mujer y otro de hombre. Esta colección es un homenaje a España. Trabajaron con distintos estampados y colores. El de mujer lleva en la espalda un mapa bordado y en el de hombre un tacón con escamas. Hechos con lana fría.

Antonio se pone triste. No hay nada de esta colección. El video se perdió.

Amalia le pregunta quién es su referente. Admiro a la persona y su profesión hasta el punto que me sirve para algo, luego nada, dice Antonio. Por mi vida han pasado varios. De Balenciaga, la sastería y cómo desarrolla los volúmenes. De Chanel las chaquetas y cómo convertir la ropa de mujer en una ropa práctica. Ni Armani ni Adolfo Domínguez le gustaron. Es aburrido llevar un Armani.

Los actores y actrices visten como el culo, sentencia. Sin estilista nunca van acertados. Todo se les quedó en los personajes, el gusto propio lo perdieron en aquellos.

Habla de su amiga Sybilla. Una genialidad que duró 10 años. Se agotó rápido. Comenta que hace más de 10 años que no hablan de trabajo, hablan de yoga, el tiempo libre. No está siendo fácil prolongar todo aquello.

Se abre el turno de preguntas. ¿Cómo podemos encontrar los jóvenes diseñadores la industria con el cierre de tantas fábricas? Antonio responde. No creemos en las cooperativas, en las cosas para compartir. Tenemos que fabricar pero como se hace en Italia. Y ésto debe resolverse desde el Gobierno. España acabará convirtiéndose en un país de servicios, no de mano de obra. España no quiere invertir en maquinaria.

Antonio también reflexiona sobre el mensaje que se está dando desde las escuelas. Se está diciendo a los estudiantes cuando salen que ya son diseñadores. Se necesita practicar unos cuantos años para encontrar tu propia identidad. Hay mucha prisa en querer tener tu nombre en una etiqueta. Todos esos mensajes de las escuelas de moda dan falsas expectativas y llevan a desengaños.

La frase: dejaré la moda cuando me aburra. Eso sí, seguiré trabajando en el mundo de la moda.

viernes, enero 05, 2007

Un año en El Prado de las Merinas

En agosto de 2005 se inauguró en Caleruega el Hotel El Prado de las Merinas.

Después de más de 1 año en funcionamiento es un buen momento para hacer balance y reflexionar sobre el trabajo realizado y el futuro. Y qué mejor que mantener una charla con René y Helena, los dos artífices de este magnífico proyecto, en el propio hotel y disfrutando de una magnífica mañana de este recién estrenado 2007.



Pregunta: ¿Qué fue lo que decidió que vinierais a Caleruega y levantarais este hotel?

Helena y René: Los dos teníamos un sueño, irnos de la gran ciudad y hacer nuestra vida en el campo. La vida en Madrid era insoportable: ruido, contaminación, inseguridad, apartamento enano con 200 vecinos a los lados, arriba y abajo, para ver un trozo de verde teníamos que ir al Retiro por no hablar de nuestros trabajos. Los horarios que teníamos eran incompatibles con hacer vida familiar. A todo esto se le unió un deseo creciente por emprender algo juntos, algo nuestro, trabajar para nosotros…

Empezamos a buscar un terreno o una casa para rehabilitar, no muy lejos de Madrid, Cuenca, Guadalajara y casi por azar llegamos a Aranda y después a Caleruega. Nunca habíamos oído hablar de Caleruega, ni siquiera conocíamos la famosa calle de Madrid que lleva este nombre. No olvidaremos la impresión que nos causó la primera vista de Caleruega. Veníamos de Peñaranda y la carretera nos pareció que estaba en un estado lamentable (afortunadamente las cosas van mejorando).

La conversación del coche se interrumpió al contemplar los imponentes muros del Monasterio. Nuestra sorpresa iba en aumento según nos adentrábamos en el pueblo. Yo preguntaba a nuestro guía (mi tía Claudi, de Aranda) ¿cómo has dicho que se llama este pueblo?. Caleruega repetía ella. Pero es que yo no he oído nunca hablar de este pueblo. Y es que yo pensaba, por aquel entonces, que sabía algo de arte y de historia medieval.

Lo siguiente que pensamos, tal y como nos había pasado en Peñaranda, es que en un sitio así, ya habría un montón de restaurantes, casa rurales y algún que otro hotel.

En una segunda visita, decidimos hablar con el alcalde, para ver si conocía a alguien que tuviera un terreno o que vendiera una casa. Al principio nos miró escéptico. Pero el día que contemplamos las vistas del pueblo desde el terreno supimos que era lo que estábamos buscando.



P: ¿Teníais experiencia en negocios de este tipo?

HyR: Respecto a la experiencia, el profesional de la hostelería, el que lleva toda la vida entre fogones en Francia, en Mallorca, en Madrid etc es René. Mi experiencia en hostelería se reduce a un mes de prácticas que hice en un hotel de París cuando acabé COU (hotel donde por cierto nos conocimos René y yo…el cocinero y la recepcionista…¡qué romántico!) y al trabajo como auditora de cuentas en una empresa durante 4 años algunos de cuyos clientes eran cadenas hoteleras.

P: ¿Con qué tipo de ayudas contasteis?

HyR: Las verdaderas ayudas han venido de nuestras familias, que han creído desde el principio en nosotros y en nuestro proyecto. Por supuesto hemos necesitado financiación de los bancos y hemos solicitado ayudas a los organismos públicos. Esto, he de decirlo, ha sido y está siendo uno de los puntos más negativos del proyecto.

Para emprender un proyecto de este tipo es imprescindible disponer de una dosis inagotable de ilusión, resistencia y tozudez, porque la impresión que tenemos es que emprender un proyecto de esta envergadura, es equivalente a una carrera de resistencia: gana el que aguanta y sobrevive a todos los papeleos, inspecciones, tributos, certificados, funcionarios incompetentes e indolentes para quienes el proyecto por el que has arriesgado absolutamente todo representa un papel más sobre su mesa.

Esto sólo para ponerlo en marcha, luego conseguir que el negocio funcione es otra historia. Pero es muy importante que la dosis de energía inicial sea muy grande, pues cuando llegas al momento de iniciar el negocio, te han intentado absorber toda esa energía e ilusión.

P: ¿Cómo fue el proceso de diseño del hotel, construcción, muebles, ...?

HyR: Lo que teníamos claro desde el principio es que queríamos hacer algo bonito, de calidad y en la medida de lo posible impactante o al menos sorprendente. Hubo un primer boceto de una amiga, que al final no pudo terminar el proyecto, pero ver por primera vez tu sueño plasmado en papel fue increíble.

Después hicimos el proyecto definitivo y luego llegó la construcción. El año y medio que duró se nos hizo interminable, sin embargo ahora parece que ha pasado hace una eternidad.

Respecto a las obras…, con tanta gente trabajando a la vez, albañiles, instaladores, yesistas, fontaneros…, podríamos escribir un libro de anécdotas, algunas de ellas graciosas y otras no tanto.

La decoración iba surgiendo según las necesidades: ahora toca elegir los azulejos… y ahora los muebles del salón que vayan con la pintura de las paredes y las cortinas y colchas que también hagan juego con la pintura… Era como estar jugando al Tetris y al final parece que las piezas encajaron.

P: ¿Muchos nervios el día de la inauguración?

HyR: Antes día de la inauguración oficial hubo otro día, la celebración del día de los Pueblos, en mayo. Aún no estaban los cristales de las puertas interiores, la calefacción, agua caliente, las mesas y sillas del comedor, bueno de hecho creo que sólo estaba pintado el restaurante y puestos unos apliques de luz para tapar los cables que salían de las paredes. Nos habíamos comprometido con el Alcalde a dar la comida para los ayuntamientos ese día y la dimos. Las mesas eran los tablones de madera del ayuntamiento, las sillas de tijera y en la cocina sólo funcionaba el horno y una plancha. Preparamos todas las mesas el día anterior y como aún no estaba cerrado del todo el hotel, René y yo dormimos en un colchón en el restaurante para asegurarnos de que todo estaba en orden. El servicio fue muy bien. Todo el mundo quedó encantado con la comida. Por suerte hizo un día de sol y calor. Nunca olvidaremos esa tarde, cuando los invitados se fueron, el lavar a mano y con agua fría los cubiertos, vasos, platos, fuentes, etc de 60 personas. Pero mereció la pena.

El día de la inauguración oficial hubo nervios, por la cantidad de gente (conocida) que vino, sin embargo, como todo estaba organizado y preparado de antemano y contamos con la ayuda de profesionales para el servicio todo salió bien.

P: Después de este casi año y medio de trabajo, ¿qué balance hacéis?

HyR: Realmente aún no hemos tenido tiempo de sacar la cabeza y ver los resultados. Lo que si hemos visto es que es un negocio complicado y que requiere tiempo para salir adelante, para hacerse un nombre, y para que te conozcan, no sólo en la zona, sino fuera también. El balance, aunque aún es pronto, es positivo. Cada día aprendes de los errores y la experiencia te va dando seguridad a la hora de tomar decisiones.

P: ¿Qué cosas se podrían mejorar?

HyR: A nivel interno tenemos muchas cosas que mejorar, como es la simplificación y el control de los procedimientos para trabajar de manera más eficiente.

De cara al cliente intentamos tomar nota de las sugerencias/críticas que recibimos, analizarlas y atenderlas en la medida de lo posible, pues muchas veces, al estar aquí dentro pierdes visión y perspectiva y tiene que venir alguien de fuera a señalarte y hacerte ver cosas que se podrían mejorar.

P: ¿Qué cosas están por venir?

HyR: En el corto plazo, las bodas y grandes celebraciones. Estamos viendo que la gente de Aranda y alrededores busca cosas nuevas, sitios nuevos y diferentes y creemos que es una oportunidad de negocio para nosotros.

P: ¿Cómo es un día en el hotel?

HyR: Un día de fin de semana por ejemplo, son 24 horas de no parar. Empiezas con los desayunos, normalmente a las 9:00, aunque a veces tienes algún cliente que quiere buscar setas temprano o salir de caza y desayuna a las 7:00.

Cuando todo el mundo ha terminado el desayuno, hay que montar el restaurante para las comidas. A esa hora la cocina ya está en plena ebullición preparando la comida del personal y el menú del día. A las 12:30 comemos todos los empleados (remunerados y voluntarios), horario europeo. Luego empieza a llegar gente a tomar el aperitivo y entre las 14:30 y las 15:30 es lo fuerte de las comidas.

A las 17:00 termina el servicio de comidas y empieza la barra. A las 20:30 cenamos y nos preparamos para el servicio de la noche. Y vuelta a empezar, preparar los desayunos…

P: ¿Cuáles son vuestros sueños? ¿Dónde queréis llegar?

HyR: Se podría decir que una gran parte de nuestros sueños ya se han cumplido al haber realizado y puesto en marcha el proyecto. Ahora queremos sacar adelante el negocio, pagar el préstamo lo antes posible y consolidar el nombre del hotel y del restaurante. Después, … ya veremos.

P: ¿Cómo valoráis la competencia de los alrededores?

HyR: Creemos que los nuevos establecimientos hosteleros y relacionados con el turismo que están surgiendo son conscientes de la necesidad de crear establecimientos de calidad y de buen servicio.

Es positivo y necesario que exista esa competencia y que cada vez haya más infraestructuras que acojan y mantengan al cliente, pues es lo que hace que haya tráfico.

Sin embargo, en nuestra opinión de nuevo es la administración la que va con un elevado retraso en el desarrollo de la zona/comarca/provincia/comunidad. ¿De qué sirve tener un pueblo/comarca precioso si las carreteras son inaccesibles o si la estación de tren más cercana está a 80 Km? ¿O si no hay una comercialización y una promoción bien gestionada y continuada de los recursos turísticos que hay en la zona?

P: ¿Cuál está siendo la respuesta de la gente?

HyR: La verdad es que esa es una de las grandes satisfacciones de este negocio: después de tener un grupo que te ha absorbido varios días enteros de preparación, organización de excursiones, comidas, atención todo el tiempo que están en el hotel etc y cuando les das la factura te dicen Oye, genial todo, nos ha encantado la comida, el sitio, el trato…lo recomendaremos. Es como oír unas palabras mágicas…

P: ¿A través de dónde se os conoce?

HyR: Eso es uno de los grandes secretos de este negocio, que aún estamos descubriendo. De momento, nos damos a conocer en los medios de comunicación locales y por internet (que es lo que más funciona, junto con el boca a boca). También estamos acudiendo a ferias y Mercados de Contratación. Supongo que algún día encontraremos la llave de la cueva del tesoro.

P: René, ¿cuál es el secreto de tu cocina?

HyR: Como en todas las profesiones, para poder hacer bien tu trabajo, te tiene que apasionar. Desde que tengo memoria, siempre me ha apasionado la cocina: hice mi primer pastel de chocolate a los ¡6 años!

Nunca dudé de lo que quería hacer. En el colegio estudiaba para poder entrar en la escuela de hostelería de París y desde mi primer trabajo en prácticas en la escuela de hostelería ya no he dejado nunca la cocina. Ahora estoy haciendo lo que todo profesional desea, crear su propia obra.


Muchas gracias a Helena y a René por atender a De Tacones y Bolsos. Hoy es la noche de Reyes, mágica noche. Mis mejores deseos para este nuevo año 2007 y que los Reyes Magos sean generesos con vosotros y con todos los que leéis estas líneas.

viernes, octubre 27, 2006

Mini Encuentro con...



Y digo mini-encuentro, porque adelataron la charla 1 hora respecto al horario previsto y desafortunadamente no me enteré. Con lo que cuando llegué allí, ya estaban en el turno de preguntas.

De lo que vi y escuché, os hago un resumen.

Durante el encuentro se pudo ver el desfile de Victorio&Lucchino para la Pasarela Cibeles con sus propuestas para el próximo verano 2007. Mientras pasaban las imágenes, José Luis comentaba que les gustaría hacer pasarela para hombre y mujer por separado. Es una pena la cantidad de trabajo que se queda en el tintero y no se ve. No sé ve mucha ropa femenina y lo que se puede ofrecer de hombre son sólo unas pinceladas.

José Victor toma la palabra para afirmar que todos los que se quieran dedicar a la moda tienen que trabajar y luchar mucho. Ellos han tenido y tienen que luchar mucho cada día ya que al final hay que mantener una empresa. Han sufrido mucho, muchas noches sin dormir pensando en cómo pagar las nóminas de todos los empleados. Pero lo importante es mantener la ilusión y sacar partido a todo, darlo la vuelta. Que en esta costura hay un fallo, bueno, pues se da la vuelta y seguro que se puede sacar algo bonito de ello. Al fin y al cabo vendemos felicidad y hay que ser positivos.

Acompañando a José Victor y a José Luis estaban, en esta ocasión, Lola Gavarrón (periodista y especialista en moda), Lola Carretero (periodista y especialista en moda y belleza) y Concha Herranz (conservadora del Museo del Traje).

Lola Gavarrón comenta, al hilo de su positivismo, que Victorio&Lucchino son conocidos como los niños, por tener siempre esa capacidad de entusiasmo.

Cambiamos a los perfumes. Carmen se lanzó en 1992. Ahora están preparando un nuevo perfume, después de Flores Frescas, del que no se puede revelar ningún dato, claro. Trabajan con multinacionales: si vendes mucho todo va bien, pero si no vendes te mandan a tomar vientos, dice José Victor. Al hilo de los perfumes y de la presentación en 1992 de Carmen, Lola Gavarrón ha traído un pequeño video de esa noche en la Casa Pilatos, en el que pudimos ver a los propios José Luis y José Victor, unos cuantos años más jóvenes, y a distintas personalidades del mundo de la moda, así como a Catherine Deneuve, expléndida como siempre.

Lola Carretera afirma que el éxito de Victorio&Lucchino se debe a que han sido capaces de crear un mundo completo, circular: tejidos, colores, formas... Han sabido crear un mundo en su totalidad. Un mundo que no está cerrado, ni muchísimo menos, teniendo en cuenta su capacidad de trabajo.

Concha les pregunta si en la colección de verano 2007, han tenido presente la caracola. José Luis cuenta la historia de la caracola. Un domingo por la tarde, en el campo y bajo un árbol se fijaron en la flor y pensaron en desglosar la flor y hacer una falda. Al día siguiente se pusieron manos a la obra y cuando lo tuvieron lo llevaron al registro de patentes. Registro en el que son muy exigentes sobre todo con los temas de moda, tratando de evitar cosas parecidas, y hacía bastantes años que no admitían nada, pero sí la caracola. Y sí, está presente en la nueva colección, pero siempre intentando dar pasos hacia delante.

Se les pregunta por las tallas de las modelos de la pasarela. José Victor responde que ellos fabrican tallas hasta la 48 y que en costura se viste a cualquier mujer. Pero que a la hora de presentar prefieren a chicas delgadas con la talla 38 porque consideran que es lo adecuado para mostrar su ropa, por estética, pero que no tienen problemas en vestir a señoras gorditas. Se vienen a Sevilla y se las toma medidas.

Sobre dónde tienen realizan la fabricación, en Andalucía, dando trabajo a 500 familias andaluzas. Sienten que han contribuído a que la moda española tenga repercusión fuera y se sienten muy orgullosos. Ya saben que fuera te consideran más que aquí, pero quieren seguir estando y apostando por la moda en España. Y por eso continúan en la pasarela Cibeles a pesar de todos su problemas e inconvenientes, y su espacio cada vez más reducido. Al hilo de ésto, Lola Carretero comenta que en general, los circuitos de pasarela son muy pequeños tanto en Milán, París... Que la moda es un gran espectáculo al que no se puede acceder, sólo un grupo reducido de personas. José Victor y José Luis asienten comentando que a ellos les gustaría poder invitar a mucha más gente a sus desfiles.

Se les pregunta cuál es su musa, en quién se inspiran. Victorio&Lucchino no diseña para un físico específico, no creen en la musa. La inspiración es la propia vida, tus sensaciones y experiencias. Hay que vestir a todas las mujeres y no se puede tener un físico específico.

¿Qué es la elegancia para Victorio&Lucchino? José Luis lo tiene muy claro. No se debe confundir elegancia con estilo. La elegancia es un don natural. No se aprende ni te lo da tu poder adquisitivo. Va innato en la persona, en lo que irradian sus posturas, sus gestos... El estilo, sin embargo, se puede aprender, adquirir y comprar. Es diferente.

El tiempo de encuentro llega a su fin y el abarrotado Salón de Actos del Museo del Traje se despide de los andaluces Victorio&Lucchino.