Miguel Gila vive con sus abuelos. Hace dibujos y lleva una vida tranquila. Al estallar la Guerra Civil él y su amigo Pedro se alistarán para defender la República frente a los fascistas. Un par de días nada más...
Es una película amable que se ve muy bien. Emocionante y triste pero sin caer en la lágrima fácil. Oscar Lasarte interpreta muy bien a Gila, un personaje complejo porque todos, muchos, nos acordamos de él. Creo que lo defiende bien y con respeto.
Una mirada al sinsentido de las guerras, y en la que Gila intenta seguir avanzando a través del humor.
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